Tirar es molesto
El gerente se convierte en “predicador” del valor de los alimentos
"Me hace sangrar el corazón que se tiren alimentos sin pensar", dice Gerald Hackl. Alrededor de un millón de toneladas de alimentos acaban en la basura en Austria cada año. La gente es mucho más cuidadosa con las vacaciones y el combustible, lo que molesta al jefe de Vivatis, que pasa a la ofensiva.
Desde Knabbernossi e Inzersdorfer hasta Wojnar's: muchas marcas conocidas pertenecen al Grupo Vivatis, con sede en Linz. "Como grupo, hacemos todo lo posible por producir nuestros alimentos de alta calidad con las mejores materias primas y en las mejores condiciones", afirma Gerald Hackl.
Alrededor de un millón de toneladas de alimentos acaban en la basura cada año
El hecho de que alrededor de un millón de toneladas de alimentos acaben en la basura cada año en Austria molesta al jefe del Grupo: "Obviamente, los alimentos tienen poco valor, de lo contrario no se tirarían".
Hackl no lo entiende: "Uno no llena el depósito de gasóleo o gasolina y luego vuelve a tirarlo. Y cuando te vas de vacaciones, te quedas los siete días que has reservado y no te vas a casa a los cuatro días y dejas que el resto se desperdicie".
"Respaldamos a Austria"
El fabricante de alimentos está sometido a una enorme presión de costes: "Seguimos pagando tres veces el precio de la electricidad y el gas". Se aceptan las desventajas en competencia con las marcas internacionales: "Estamos comprometidos con Austria y queremos producir aquí. Compramos aquí todas las materias primas que podemos". Hackl no se cansa de insistir en el valor de los alimentos y reclamar un enfoque más consciente: "Somos predicadores".








Da dieser Artikel älter als 18 Monate ist, ist zum jetzigen Zeitpunkt kein Kommentieren mehr möglich.
Wir laden Sie ein, bei einer aktuelleren themenrelevanten Story mitzudiskutieren: Themenübersicht.
Bei Fragen können Sie sich gern an das Community-Team per Mail an forum@krone.at wenden.